Vídeo y Big Data: la última frontera

20th Jun 2014 Tendencias

Uno de los mayores valores añadidos que el vídeo puede aportar, aparte de hacernos reír en youtube, trata sobre el potencial que tiene para dar sentido a nuevas fuentes de información, como el Big Data.

Durante mucho tiempo, los resultados han ido traduciéndose en valores, números, letras…Sin embargo, el vídeo está posicionándose como una de las mejores fuentes para aprender sobre el consumidor. Ahora mismo, gracias a cámaras de vigilancia, Dropcams, GoPro, móviles, o hasta grabadoras anticuadas en cinta, somos capaces de producir video a una escala sin precedentes (en youtube se añaden 100 horas de vídeo por minuto, por ejemplo)

Pero, ¿Qué pasa si aprovechamos todo este potencial para analíticas a pie de tienda física? Por ejemplo, el gerente de un comercio electrónico puede saber cuantas personas han visto un artículo, cuál es la «zona» de la tienda con más tráfico, etc…y así podrá ajustarse y vender lo más posible. Esto, hasta hace muy poco, era imposible de hacer en una tienda física. Y aquí es donde el vídeo entra en juego: podemos acceder, a un precio relativamente moderado, a un sistema que nos diga cuál es la zona con más intensidad de tráfico de la tienda (zonas calientes) y por tanto cuales son los artículos más vistos, el recorrido que hacen dentro de la tienda, etc.

Et voilà, ya sabemos que podemos descatalogar el libro azul claro sin miedo a defraudar a nuestros visitantes. O replantear el precio, y volver a hacer la analítica. En cualquier caso, todas estas posibilidades nos las abre la tecnología audiovisual.